Recordar sirve de mucho cuando aprendemos, pienso en
cada uno de los momentos ya vividos, en las personas que han estado, en las que
se han marchado y en todos aquellos que ahora permanecen en mi vida. Cada
instante será imposible de borrar ya sea bueno o malo, siempre quedará en mi
corazón cada detalle.
Con tristeza recuerdo a personas muy importantes
para mí, que me han dado la vida y que las he querido con toda mi alma, ellos
ya no están aunque para mí vivan eternamente, por otro lado, pienso en las personas
que si están, a las que quiero con la fuerza más grande que puede existir
aunque no lo sepan, aunque lo duden o aunque piensen que no es así, algún día
ya no estarán junto a mí, o bien porque yo me haya ido o ellos ya no estén pero
quiero dejar muy claro que un sentimiento verdadero se demuestra con el corazón
y con la mirada, se transmite y más aún cuando permanecen muy pero que muy
cerca de mi entorno.
El tiempo va en nuestra contra y un sólo segundo
podría ser todo un año, por ello, hay que valorar todo aquello que se tiene,
cuidarlo y amarlo más que nunca, así pues, cada palabra malintencionada deberá
ser olvidada, cada daño borrado y cada dolor sanado, todo esto antes de que no
podamos hacerlo.
Acepto a todos a los que amo tal y como son, con
cada uno de sus errores y eso es lo bonito del amor.
Dedico mis palabras a todos aquellos que pueden o
han podido pensar en algún momento que no los quiero cuando en realidad daría
mi vida por ellos, siempre es bueno recordarlo.
Marian